lunes, 5 de diciembre de 2011

VIVENCIAS Y CONVICCIONES "IN SITU"

Hace un par de entradas comenté la visita recibida por parte de MªCarmen Pastor, directora del CEIP José Ramón García Antón de Sant Vicent del Raspeig. Pues bien, esta vez hemos sido nosotros los que fuimos a visitarla a ella a su centro. Divididos en dos grupos fuimos los pasados viernes, 18 y 25 de noviembre a ver en primera persona el día a día de un centro educativo de primaria.

 
Primero de todo hicimos un pequeño recorrido por el colegio, para ver las instalaciones, de las que hay que decir que están muy bien. Es un colegio muy acogedor, y muy bien preparado, y está muy bien cuidado. He estado previamente en algunos otros centros públicos de reciente construcción y no me dejaron esa misma buena impresión que el CEIP que dirige Mª Carmen. Aulas espaciosas, bien organizadas y adaptadas, pasillos amplios y bien cuidados, y espacios como el comedor, el gimnasio, el aula de musica o el patio, con unas condiciones que ya querrían muchos.

MªCarmen nos llevo al aula donde ejerce su tutoría y nos presentó a sus alumnos, ahí fue donde algo se movió por ahí dentro, y a eso me refiero en el titulo de esta entrada. Al verme delante de aquellos niños, en la posición del maestro, me di cuenta de que eso era lo que realmente quería para mí. Era el empujoncito que hacía falta, la tecla que quedaba por tocar para acabar de convencerme de que, por fín, he dado con el camino.


Mi grupo tuvimos la suerte de que el día que fuimos los niños tenian el festival de otoño, con la interpretación del cuento de Maria Castanya, una tradición popular catalana. Habían decorado todo el colegio para la ocasión con figuras recortadas y coloreadas de la castañera, llenando los pasillos de guirnaldas. Además confeccionaron unos manteles para sentarse todos alrededor, después de la interpretacion del cuento, a comer castañas que asaba una señora muy bien caracterizada para la ocasión. Además el coro del colegio interpretó canciones típicas de esta celebración que después cantaron, e incluso bailaron, todos los niños del colegio.

La jornada fue muy entretenida y los niños nos acogieron genial. Me llamó la atención ver a todos los padres desde fuera de la valla del patio viendo la representación, inlcluso parece que discreparon un poco en que estuvieramos nosotros allí y ellos no, quizas a eso se refería Mª Carmen cuando en su visita nos expuso lo de que en su centro la implicacion de los padres era muy grande, tanto que a veces había que pararles los pies. Son detalles que marcana esa diferencia en al educación, la presencia de los apdres quizas coartaria un poco la libertad y la espontaneidad de los niños, y no serviría de nada entonces la realización de este tipo de actividades.

Muy buen sabor de boca me dejó la visita, me gustaron las instalaciones, me encantó la representación, el trato por parte de MªCarmen pero, sobre todo, me quedo con la satisfacción del convencimiento de saber que he elegido bien, y de poder saber por fín qué quiero ser.





No hay comentarios:

Publicar un comentario